Blog personal anti-stress...


domingo, septiembre 11, 2005

Indignante

Bueno bueno bueno... que fin de semana. Éste sábado hemos celebrado la despedida de soltero del novio de mi hermana, es decir, mi futuro cuñado. Estuvimos cenando en un restaurante que se llama "La Almeja Picante", en Madrid. ¡Menuda estafa! Para empezar, el restaurante debe tener unos 50 metros cuadrados. Con deciros que el que se sentaba en la mesa de al lado de la puerta de entrada se tenía que levantar cada vez que entraba un grupo... Y ni escenario ni ostias, el espéctaculo a ras de suelo entre las mesas. Vamos, que si estás un poco alejado, no ves nada de nada.

Claro que el que no veas tiene una ventaja, y es que tampoco te ven mucho. Si amigos, porque el espectáculo consiste en una Drag Queen de dos metros riéndose en la puta cara de los comensales. Se está poniendo de moda ese tipo de espectáculos. Pues oye, eso también lo se hacer yo, ¿Eh? Me pongo una peluca, empiezo a sacar a la gente de las mesas y a meterme con ellos, que si al bajito le llamo "Tamagochi", al poco agraciado le llamo FEO a la cara... eso si, claro, siempre acabando con un "jijiji, que es broma". ¡Ah, bueno, si es broma entonces no me enfado! No te jode...

La cena fue apoteósica. Tienen dos menús, uno de 38,5 euros, y otro de 41,5 euros. Los nombres de los platos de lo más ocurrentes, pero los platos con ocurrencia ninguna. Yo comí pimientos rellenos de merluza y un solomillo. No creas que tenía forma de pene o algo, no. Lo que tenía forma de pene era uno de los panes que nos sacaron. Uno de los TRES panes para 15 personas. Y TRES botellas de vino, para 15 personas. Y luego al final DOS botellas de cava, para 15 personas. Que te dan ganas de irte al Burguer King al salir... (Por cierto, el entrante es a compartir entre dos...)

Y cuando ya estás hasta los cojones del chapas del Drag, entonces viene el "streap-tease". De eso se encargan los propios camareros. La tía estaba muy buena, todo hay que decirlo, o al menos eso parecía con ropa puesta, pero ¿Vosotros la visteis desnudarse? Pues yo tampoco. Al camarero tampoco le vi desnudarse, pero bueno, eso me dio igual.

Y luego viene el fin de fiesta. ¡Ole! La cuenta mientras te echan, prácticamente, del local. Si, no te echan en plan "Vayan saliendo" como en los bares cuando chapan, no, es una forma muy sutil de echarte, que consiste básicamente en dejar en la mesa sólo el mantel, para que te sientas incómodo. Y si, lo consiguen. Luego la cuenta. Impresionante. Además de los en torno a 40 euros del menú, te cobran por el cocktail que te dan al sentarte (Que no has pedido, pero te lo cobran), la tarta también te la cobran aparte, y el espectáculo también te lo cobran aparte. Más el I.V.A., claro. Vamos, que en total salimos a unos 70 euros cada uno, sin contar al novio que por supuesto no pagaba. Y luego buscas en internet y sale que el precio es en torno a los 30 euros... Pues eso, unos timadores de espanto.